De acuerdo con las autoridades españolas Shakira, por consejo de sus contadores, utilizó un entramado societario, con sede en paraísos fiscales como las Islas Vírgenes, Islas Caimán, Malta, Panamá y Luxemburgo, todo con el fin de evadir impuestos y no pagarlos en España. El ministerio público español acusa:
“Todas estas sociedades carecieron de medios materiales y personales para realizar actividad alguna y los gastos que generaron fueron los puramente administrativos. Todo con el fin de “ocultar a la Hacienda pública las rentas y el patrimonio de la acusada“. A pesar de la posibilidad de cárcel, Shakira todavía tiene la posibilidad de negociar, claro, para ello tendría que pagar los impuestos que evadió y las multas que sumarán varias decenas de millones de euros. Parece que más barato le saldrían los 8 años de cárcel.