Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
Ricardo Ahued parece cansado de responder, un día sí y otro también, a los cuestionamientos sobre su interés por competir por la gubernatura en el 2024. *** Este martes el alcalde de Xalapa rechazó que esté entre sus aspiraciones políticas ocupar la candidatura a la gubernatura por Morena en el año 2024, o de cualquier otro partido político, pues aseguró que su única “ambición” es concluir la administración municipal, sin dejar cuentas pendientes. *** “No tengo ambiciones políticas, tengo ambiciones de cumplir lo que el destino (…) Las aspiraciones y ambiciones políticas son como un tema de levitar y yo siempre ando sobre la tierra, no ando levitando, ni me ando promoviendo, sí tengo pasión por servir, pero no por el poder, eso que quede claro”. *** Su objetivo en estos momentos, dijo, es dejar finanzas sanas en el ayuntamiento a su cargo. *** Ricardo Ahued aprovechó para confirmar lo que se comentaba desde el año pasado: que no estaba en sus planes volver a ser alcalde de Xalapa, pero aceptó la invitación del presidente López Obrador, para ocupar la candidatura a la alcaldía por Morena en el proceso electoral del año 2021.
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Apostándole al olvido, muchas leyendas se han construido a partir de la detención de quien fuera el segundo fiscal general de Veracruz, desde la creación de esa figura, en la administración de Javier Duarte.
Justo es decirlo, para partir de datos que son convincentes: La “autonomía” que otorga la Constitución de Veracruz a la Fiscalía General del Estado (FGE) ha sido, es –y al parecer seguirá siendo- una farsa. Ninguno de los tres personajes que han encabezado esa institución ha sido autónomo, todos han tenido el perfil de “fiscal carnal”.
Las siguientes son algunas de las fantásticas teorías que se han construido a partir de la captura de Jorge Winckler:
1. “Es un preso político”. Atendiendo un principio fundamental del derecho –la presunción de inocencia- el exfiscal no ha sido sentenciado aún por alguno de los delitos que se le imputan. Hay, sin embargo, suficiente información, demasiados testimonios, de las prácticas francamente ilegales que utilizaba para realizar su labor. Él sí tuvo a presos políticos en la cárcel, y nunca presentó elementos de peso para mantenerlos en prisión.
2. “Miguel Ángel Yunes Linares lo entregó como parte de un pacto”. Nadie en su sano juicio actuaría contra una persona que conoce todos –literal: ¡todos!- sus demonios. Pasaba antes con los procuradores y ahora con los fiscales: si vas a removerlo, ofrécele todas las garantías de que no será molestado, pues ofenderlo o amenazarlo podría provocar que, en un arranque de ira, termine por revelar algunos de esos secretos que posee.
3. “Winckler ocultó carpetas y liberó a criminales”. No hay una sola carpeta de investigación contra Jorge Winckler en el que se le acuse de tales delitos. Se le acusa de secuestro y de tortura, ambas imputaciones muy sólidas. De hecho muchos de los “golpes” que ha dado la actual Fiscalía son producto de las investigaciones que inició el exfiscal. Es en la actual Fiscalía en la que se inventan culpables, con la consecuente impunidad para los verdaderos delincuentes.
4. “Winckler fue víctima de una jugada ilegal para separarlo del cargo”. En efecto, su salida estuvo plagada de inconsistencias jurídicas; fue prácticamente un “golpe de estado”. Ese caso pudo haberlo ganado, aunque las tropelías cometidas durante su gestión terminaron por condenarlo.
5. “Winckler dijo que no se irá solo”. Esa es una frase que, sin sustento alguno, le atribuyen al exfiscal al momento de ser detenido. Dicha expresión, sin embargo, se contrapone con su postura frente al juzgador, ante quien se declara inocente.
6.- Jorge Winckler, “objetivo prioritario de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz”. Si para atender las “prioridades” se tardan casi tres años, ¿cómo será con aquellos delincuentes que no representan tal urgencia?
Muchas otras fantasías surgirán en los próximos días. Por lo pronto, el juez de control le aplicó medida cautelar de prisión preventiva por un año, en tanto se desahoga el proceso iniciado en su contra.
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Epílogo.
Uno de los casos de “homonimia” que ha impactado a los veracruzanos, llegó este martes a la conferencia de prensa del presidente López Obrador, quien le pidió a la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, que revise “inmediatamente” el caso de Moisés Álvarez Pérez, detenido de forma errónea por la Interpol en Veracruz. *** López Obrador fue cuestionado sobre el caso de Moisés Álvarez: “Hoy mismo, Rosa Icela (se pondrá en contacto), y si es como lo planteas, además podemos investigarlo pronto”. *** El veracruzano fue confundido con un fugitivo buscado por el FBI, debido al parecido de su nombre. Moisés Álvarez Pérez es un albañil del puerto de Veracruz, mientras que Moisés Pérez Álvarez es un presunto homicida buscado por autoridades de Estados Unidos. “De inmediato tiene que quedar en libertad”, comentó el presidente. *** En las últimas 24 horas se confirmaron 30 mil 497 nuevos casos de Covid-19 y 152 fallecimientos, con lo que el Sistema de Vigilancia de Enfermedad Respiratoria (Sisver) tiene un registro acumulado de 6 millones 659 mil 38 afectados y 327 mil 261 que han perdido la vida. *** Las hospitalizaciones se mantuvieron sin cambio, con una ocupación de 18 por ciento en camas generales y 5 por ciento en las que tienen ventilador. *** Los casos activos estimados hoy son 190 mil 962 y las entidades con más personas que iniciaron con síntomas en los pasados 14 días, por cien mil habitantes, son Ciudad de México, Colima, Baja California Sur, San Luis Potosí, Querétaro, Tlaxcala, Coahuila, Sinaloa, Nuevo León y Tabasco.