Imagine, está celebrando el día más feliz de su vida y justo cuando la euforia en la fiesta aparece, usted muere. Quizás esto suene poco probable, pero en la ciudad de Firuzabad, en Irán, un suceso así ocurrió. Resulta que una pareja de recién casados estaba festejando a lo grande su boda. Sin embargo, los ánimos se caldearon y en medio de la celebración los invitados empezaron a lanzar disparos al aire.
Nadie decía nada, pero un disparo al aire provocado por el primo del novio salió mal e impacto en el cuerpo de la novia. Rápidamente se llamó a la ambulancia y ella fue llevada a urgencias donde los doctores le informaron al esposo que su pareja había fallecido.
Tras confirmarse la muerte de esta mujer, sus órganos fueron donados para que alguien más pueda usarlos; esa fue la última petición de la novia. Horas después de la tragedia, la policía iraní detuvo al tirador. En la fiesta hubo otros dos heridos.
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