La jueza Raíza Cajigas Campbell, del Tribunal de San Juan aceptó los alegatos de un joven de 21 años que dice ser sobrino de Ricky Martin. En esos alegatos asegura haber mantenido una relación sentimental con el cantante, una relación que duró siete meses. Señala el que acusa que después de dos meses de ese rompimiento Ricky Martin le llama todos los días y que en una Range Rover negra merodea su casa. Señala la juez Raíza Cajigas en su resolución de hechos: «La parte peticionaria demostró que existe una probabilidad sustancial de riesgo inmediato de maltrato».
¿Demostró? Por su lado Ricky Martin en su primera declaración sobre el caso asegura que «la orden de protección presentada en mi contra se basa en alegaciones totalmente falsas, por lo que enfrentaré el proceso con la responsabilidad que me caracteriza». Eric Martin hermano del cantante boricua dio cierta información sobre el denunciante. Asegura que es un sobrino que «lleva tiempo desaparecido de la familia. Y todos lo queremos en el alma. Aunque tenga problemas mentales, siempre hemos estado luchando».
La pregunta es, ¿por qué si las acusaciones son falsas, las aceptó una juez? ¿Por qué si el denunciante está mal de la cabeza, no lo detectó la jueza? ¿Qué pruebas contundentes presentó el sobrino para que la jueza anotara: «La parte peticionaria demostró que existe una probabilidad sustancial de riesgo inmediato de maltrato?»
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