Se dice que los grupos del narcotráfico entre sus reglas internas está no meterse con la iglesia, ya sea católica o protestante, pues piensan que meterse con Dios significaría sufrir en vida y muerte. Sin embargo, esa regla ya cambio y ahora grupos religiosos temen por sus vidas. Y es que sacerdotes y curas han declarado a varios medios de información que los grupos del crimen organizado ya los amenazaron con quemarles sus iglesias si es que no pagan piso.
“Nos dirigimos con profundo dolor, preocupación e indignación por la creciente y hasta ahora incontenible ola de violencia que padecemos en prácticamente todos los municipios de nuestro país, con gran desconsuelo por los desplazamientos forzados y las miles de vidas inocentes que han sido brutalmente arrancadas, llenando de luto a miles de familias”, explicó el religioso de Tamaulipas Arturo Carrasco.
En este mismo sentido, Arturo Carrasco, sacerdote anglicano de Iglesias por La Paz, pidió al gobierno de Andrés Manuel López Obrador cambiar su política de “abrazos no balazos”, pues el cura piensa que esto no ha ayudado en nada a la población mexicana.
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