En esa ocasión los padres denunciaron ante los medios de comunicación diversas irregularidades por parte de la profesora, pues al momento de percatarse de las lesiones que había sufrido Juan Pablo, intentó que, entre los padres de los agresores y los padres de la víctima hubiera un acuerdo para que estos no procedieran legalmente. El pasado viernes 24 de junio se dio la audiencia inicial contra de los dos menores que prendieron fuego a Juan Pablo.
Hasta el momento se sabe que se determinaron medidas cautelares de distanciamiento. Además de esto informaron que ambos menores deberán estar presentándose ante las autoridades de manera frecuente para ser analizados. Un juez dictaminó que estarán en una constante vigilancia durante tres meses para después determinar cuál será su castigo. Acerca de la maestra han dicho que tiene impuesta una demanda por complicidad y en unos cuantos días se iniciará un juicio. Juan Pablo, el niño Otomí se encuentra aún hospitalizado y hasta el momento lleva cuatro cirugías.