¿Quién es el que involuciona? Fue el Andrés Manuel López Obrador del 2006 quien dijo que acabaría con el influyentismo, el nepotismo y el compadrazgo; pero el López Obrador de 2022 se molesta cuando en el libro “La Casa Gris” de Raúl Olmos, se advierte como su secretario particular, Alejandro Esquer, junto con su hija, se prestan para que José Ramón López Beltrán pueda enriquecerse otorgando contratos multimillonarios a empresas como Baker Hughes, la que le prestó la casa en Houston.
La claridad de esa vinculación es suficiente, Carmelina Esquer Camacho, directora de Pemex Internacional, se mudó a Houston al mismo tiempo que José Ramón López Beltrán, lo que hace suponer que quien en realidad maneja los asuntos internacionales de Pemex es el hijo del presidente. Todo eso le duele al presidente, le duelen las evidencias que demuestran que es tan corrupto como los anteriores gobernantes.