Este lobo vestido con piel de oveja fue arrestado en el aeropuerto de Los Ángeles el 3 de junio de 2019, acusado por 20 cargos, incluyendo violación, extorsión y posesión de pornografía infantil, entre otros crímenes perpetrados en California. Hoy ha sido sentenciado por una Corte norteamericana, tan solo por 16 años y unos cuantos meses.
Dicen que tanto peca el que mata la vaca, como el que le agarra la pata, y en este caso, durante décadas, las autoridades mexicanas, incluidas las de la 4T, se han hecho de la vista gorda, de una organización religiosa que ha cometido actos criminales y que sus líderes se han enriquecido vergonzosamente de una feligresía pobre, pero muy numerosa. Por cierto, la cúpula de esta organización ha cerrado filas con el sentenciado. Ojalá y que la sentencia de este perverso sujeto le abra los ojos a la Segob y comience a investigar a esta secta.