El presidente de México ha dicho: “Si ya estoy pensando que le vamos a dar otra vuelta a la tuerca, porque hace falta darle más al pueblo y a ver si es posible pasar de la austeridad republicana a una fase superior, que podría llamarse pobreza franciscana”.
Su austeridad republicana es la que ha estado aplicando, quedándose con los recursos de estados y municipios, la política de “pobreza franciscana” sería exigir a los estados y municipios que tiene controlados, a que le devuelvan más dinero. Al final los pobres franciscanos serán los de las clases medias, que son los que sostienen este país.