La revelación que hace El Universal sobre la refinería de Deer Park en Houston, Texas, pone nuevamente en tela de juicio la pertinencia de la compra de esta refinería por parte del gobierno de López Obrador. ¿Quién le metió al presidente la idea de comprar el 100 por ciento de las acciones de una refinería que desde 2019 ha venido manejándose con pérdidas? De acuerdo con el reporte de El Universal, «entre 2019 y 2021, esta refinería suma pérdidas por 17 mil 739 millones de pesos en su operación como negocio».
Los siguientes años la pérdida se debió a mantenimientos, en 2020 se debió a la desaceleración como resultado de la pandemia y en 2021 a «reparaciones no esperadas en la unidad principal de destilación y coquizadora de la refinería, y a las fuertes nevadas en la zona de Texas». El caso es que ese gran negocio que nos haría autosuficientes en cuanto a producción de gasolina, resultó ser un lastre que cargamos todos los mexicanos.
Si a esto sumamos una refinería Olmeca de Dos Bocas que en su primer año no producirá ni un solo litro de gasolina, pues lo más seguro es que en el sexenio de la Cuarta Transformación tengamos que vivir con los precios altos de la gasolina. Claro, en su realidad el presidente ha dicho que él sí logró bajar el precio de la gasolina. ¿Mentiroso, cínico o burlón? ¿Qué calificativo escoge para López Obrador?
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