El cómputo final, que fue ratificado por el Tribunal Electora, indica que votaron 16 millones 502 mil 636 personas. De ellas, un millón 063 mil 209 votaron por la revocación del presidente López Obrador, 15 millones 159 mil 323 votaron a favor de que siga en el cargo y 280 mil cuatro tuvieron votos nulos.
La lección que queda es que los caprichos personales salen muy caros y el mismo presidente sabía que era muy difícil que los mexicanos salieran a las urnas, como lo hicieron en el 2018, cuando el Ejecutivo federal obtuvo un poco más de 30 millones de electores. Ni hablar, ni el dinero que se gastó.