No cabe Gertz Manero en la Fiscalía y es muy posible que el presidente López Obrador, para quitárselo de encima, haya permitido que Julio Scherer, su exasesor jurídico, demande ante la misma FGR al fiscal. La denuncia es por tráfico de influencias. Dice el texto de la demanda publicado en el semanario Proceso: “El fiscal general de la República, el doctor Alejandro Gertz Manero; el fiscal de Control Competencial, el señor Juan Ramos López, y otros servidores públicos de la institución deben responder… por las faltas, omisiones y violaciones sistemáticas graves a los derechos humanos, a la ley en perjuicio del suscrito y de otras personas, así como a los principios que debieron regir su actuar”.
Es inminente la salida de Gertz Manero de la fiscalía a su cargo. Estamos seguros que una vez afuera, como al perro más viejo, le van a cargar más pulgas.