La mujer, al ver que nadie hacía nada para concederle su petición, se puso agresiva e incluso abofeteó a un guardia que intentó tranquilizarla. Una pasajera que trasbordaba en el mismo vuelo señaló que en un momento la mujer quiso hacer el intento de abrir la compuerta, pero se lo impidieron.
Hasta el momento han indicado que, como consecuencia de su comportamiento a bordo del vuelo, el capitán tuvo que detener el viaje terminando en Austria. La aerolínea indicó a los pasajeros que harían una parada imprevista por motivos de seguridad. Todos en el vuelo se encontraban desconcertados por el accionar de la mujer quien por el llanto de un bebé hizo que el vuelo se detuviera. La aerolínea comunicó que la mujer no podrá subir a un avión de low cost británica Jet2, debido a su mala actitud pues nunca dio señales de arrepentimiento ni mucho menos pidió disculpas