Por si usted no se había dado cuenta, la Cumbre Tajín ya se llevó a cabo, y tanto la secretaria de Turismo de Veracruz como el gobernador Cuitláhuac García, echan las campanas a vuelo. La bailadora secretaria de Turismo, que en estos dos últimos años acusó a la pandemia por su total ineficacia e inoperancia, salió a decir que la Cumbre Tajín está a la altura del Festival Internacional Cervantino. ¿Habrá ido alguna vez al FIC la señora Arbesú? No tiene ni idea de lo que dice, pues para ser semejante a ese festival se requieren de certificaciones internacionales, que la Cumbre Tajín no posee.
Quizá en otro tiempo la Cumbre Tajín pudo presumir ser un espectáculo internacional; vaya en alguna ocasión hasta los Pet Shops Boys estuvieron en ese escenario, igual que Calvin Harris, Ana Torroja y Café Tacuba. En este 2022 la Cumbre Tajín tuvo a Intocable como platillo principal, y a los Cojolites y Los Aguas Aguas. ¡Nada que ver!
El gobernador dice que hubo una derrama de 50 millones de pesos; ¿una derrama para quién? La verdad es que los habitantes de la zona del Tajín reciben muy pocos beneficios de que año con año la Cumbre se celebre sin que haya mejoras en la infraestructura carretera en caminos, así como mejoras en su condición de vida. Pero así las cosas con esta transformación de cuarta que basa sus victorias en mera palabrería.
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