El profesor fue herido en su brazo y tras las acciones pasadas, las autoridades estudiantiles acudieron para controlar la situación. Aunque el joven no había presentado anteriormente conductas irregulares como agresividad o bajas calificaciones, se concluyó que la sanción para el alumno sería la expulsión. Esto como muestra de que no habrá tolerancia para este tipo de acciones.
Tras lo sucedió, los alumnos de la institución comenzaron a crear rumores, que no fueron detallados, sobre las razones de los hechos. Sin embrago, las autoridades estudiantiles emitieron un comunicado donde expresan que la agresión fue controlada por ellos y que es un caso aislado que no pasará a mayores. También mencionaron que aun así se investigará más a fondo a los dos individuos.