Juan David Castilla / Xalapa, Ver. La plaga de la roya ha mutado y dañado el 50 por ciento de los cafetales del estado de Veracruz, durante esta cosecha 2021-2022.
El problema ha sido notorio en las zonas de Cosautlán de Carvajal, Naolinco y Tepetlán, municipios cercanos a la ciudad de Xalapa.
En la actualidad se contabilizan 90 mil hectáreas de café en la entidad, de las cuales 45 mil registraron daños por el hongo.
De acuerdo con Cirilo Elotlán Díaz, secretario del Consejo Regional del Café de Coatepec, las variedades que anteriormente eran resistentes a esta plaga también han resultado afectadas.
«El gran problema de esta plaga es que está mutando. Hasta el año pasado, los catimores, las variedades catimores, que eran los resistentes a roya, ahora también les está pegando la roya», expresa.
El líder cafetalero explica que el desarrollo de la roya tiene tres ciclos, cuyo impacto incrementa con el paso de los meses, afectando a las plantas de café.
«Su desarrollo tiene tres ciclos: en mayo-junio, que es leve; agosto-septiembre, que es un poco más severo; y la tercera en noviembre-diciembre, que era cuando acababan las plantaciones, siempre y cuando esas plantaciones estuvieran cargadas de café. En este momento se están dando fenómenos de que la roya está presente».
La roya es un hongo fitoparásito que es exclusivo de los cafetales. Es considerada una de las enfermedades más catastróficas que puede afectar a los cultivos y está dentro de las que más pérdidas ha ocasionado en los últimos 100 años.
En este momento, los productores no pueden aplicar un fungicida, debido a que las floraciones podrían resultar afectadas y perder calidad.
«Al aplicar un fungicida podemos ahuyentar a las abejas que permiten la fotosíntesis, se nos complica. Tenemos que esperar a que la planta desarrolle toda su floración y una vez pasando esa etapa ya podremos aplicar algunos productos de contacto».
La roya no permite que el café madure y ocasiona que se caiga de la mata, generando pérdidas cuantiosas para los cafeticultores.
Hasta hace un tiempo, de acuerdo con el Padrón Nacional Cafetalero, se tenía registro de 135 mil hectáreas, pero solo se conservan 90 mil hectáreas.