Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
Si el presidente López Obrador se toma la libertad de injuriar desde su púlpito al periodista Carlos Loret de Mola (a quien tachó de “golpeador, corrupto, mercenario, sin principios y sin ideales”), la mala copia que tenemos en Veracruz se apresuró a hacer lo propio, sin medir que estaba ante una mujer, profesional del periodismo, que cumplía estrictamente con su trabajo. *** Durante la conferencia de prensa que ofreció este martes el gobernador (para hablar de ese tema por el que –dijo- no iba a perder su tiempo), la reportera de Mega-Noticias, Sarah Landa fue maltratada por Cuitláhuac García, quien la tachó de mentirosa y de distorsionar los hechos. *** “Ve qué papel estás jugando como medio. ¿De qué medio vienes? ¿De Mega-Noticias? ¿Es tu derecho mal informar a la sociedad?”. *** Ese es el servidor público que cada que se conoce de un ataque a un comunicador promete que no habrá impunidad y que no permitirá que se vulnere la libertad de expresión. *** Palabrerías. El buen juez por su casa empieza. *** Vaya desde este espacio el respaldo solidario con la colega.
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El periodista Jorge Fernández Menéndez escribió lo siguiente:
“La alcaldesa de Acapulco, Abelina López, la misma que justificó la ola de violencia que vive el puerto atribuyéndolo al calor y a que la gente consumía muchos carbohidratos, rechazó que se realizara alguna acción judicial contra los vándalos que arrojaron un tráiler de la empresa Soriana contra los elementos de la Guardia Nacional que intentaban desalojarlos de la caseta de Palo Alto, porque el tráiler, dice la alcaldesa, no era conducido por nadie, por lo tanto, dijo, no hay delito que perseguir. Pocas veces hemos escuchado una mayor estupidez en nuestra ya de por sí prolífica clase política”.
Está claro que este experimentado analista no se ha asomado en los días recientes al estado de Veracruz.
Acá tenemos a un exponente de la misma categoría, y este martes dio una magistral muestra de ello.
Como diría Jack El Destripador: “Vayamos por partes”.
– Esta derogación del delito de ultrajes va traer buenos dividendos para las barras de abogados porque van a ofrecer sus servicios a los presuntos delincuentes que están por este delito.
En primer lugar, los abogados no les van a ofrecer sus servicios a “presuntos delincuentes”, sino a presuntos inocentes.
El artículo 11.1 de la Declaración Universal de Derechos Humanos dispone: “Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la Ley y en un juicio público en el que se hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa”.
– Además de los 40 jefes de plazas, hay 525 lugartenientes de la delincuencia organizada; obviamente habrá un gran negocio para las barras de abogados si se deroga el delito, porque quienes no tienen ética ofrecerán sus servicios.
Una vez más: si no tiene pruebas de sus dichos, no puede hablar de “jefes de plaza” y de “lugartenientes”. Y los abogados no fallan a su ética porque –hay que insistir- no se trata de “presuntos delincuentes”, sino de presuntos inocentes.
En su conferencia de prensa de este martes, el gobernador Cuitláhuac García ocupó buena parte de su tiempo en recrear el momento (octubre del 2003) en el que legisladores panistas hicieron modificaciones al artículo 331 del Código Penal de Veracruz y puso especial énfasis en el hecho de que el principal promotor de esas reformas fue el ahora senador panista Julen Rementería, e incluso se tomó el tiempo de dar lectura a la participación en tribuna de quien, en ese entonces, era coordinador de la bancada panista.
Sin embargo, el mandatario estatal mintió al asegurar que ese texto seguía vigente hasta la fecha.
Apenas el 11 de marzo del año pasado la bancada de Morena impulsó una reforma a ese mismo artículo 331 y fue la entonces presidenta de la Mesa Directiva, la diputada Adriana Paola Linares Capitanachi (quien en la actualidad ocupa de manera ilegal el cargo de secretaria ejecutiva del Sistema Estatal Anticorrupción) la que salió a defender la propuesta del gobernador:
“El dictamen que nos ocupa complementa de manera clara, nuevas hipótesis que fungen como modalidades agravantes de la pena en los delitos de despojo y de ultrajes a la autoridad, principalmente, como medidas de política criminal para disuadir o castigar el aumento de la incidencia de estas conductas delictivas, aumentando las sanciones sólo en aquellos casos en que se prevé como medio comisivo el uso de la violencia, o se prevé circunstancias específicas que colocan a las víctimas en desventaja y que coloca en mayor estado de riesgo; lo que también resulta pertinente y proporcional para proteger, además de los derechos reales y la función pública, respectivamente, proteger la integridad de las personas”.
Lo que busca Cuitláhuac García es llevar a la sociedad, a los grupos políticos y a los medios de comunicación a un falso debate. La iniciativa para derogar el artículo 331 del Código Pernal de Veracruz fue enviada al Congreso por el propio gobernador, como respuesta a una de las recomendaciones que emitió la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Lo que el mandatario estatal pretende con este ruido, es justificar un mayoriteo de la bancada de Morena para ¡rechazar la iniciativa del gobernador!, con lo que se le respondería a la titular de la CNDH -la amiga del presidente López Obrador Rosario Piedra Ibarra- que el Poder Ejecutivo cumplió con proponer la derogación, pero que el Poder Legislativo se la negó.
Lo que entre abogados se conoce como “una chicanada”.
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Epílogo.
Esta entidad, cuyo gobierno presume que se ubica “entre las más seguras del país”, registró más de mil homicidios dolosos durante 2021. Carlos Penna, director de la consultora TResearch, informó: “Veracruz de un año a otro creció 16 por ciento en homicidios dolosos, pero hay una mala noticia, el 16% es una cifra que está entre los estados donde más creció la violencia entre 2020 y 2021 y entre enero y diciembre del 2021 fueron 1221 homicidios dolosos”. *** La cifra de muertes a causa de la Covid-19 en México ascendió este miércoles a 310 mil 627 defunciones, luego de que la Secretaría de Salud notificó 743 nuevos fallecimientos en las últimas 24 horas. Se trata de la segunda cifra diaria más alta de decesos registrada en el marco de la cuarta ola de contagios. El primero de febrero pasado se registraron 829 nuevas defunciones. *** En el reporte técnico diario sobre el avance de la epidemia del coronavirus en el país se registraron 24 mil 898 nuevos casos confirmados, para llegar a un acumulado de 5 millones 192 mil 008 infectados. *** La Secretaría de Salud detalló que el martes 8 de febrero se suministraron 388 mil 361 vacunas contra Covid-19 a nivel nacional. El Gobierno federal destacó que se han aplicado 170 millones 203 mil 675 dosis como parte del plan nacional de vacunación para controlar la pandemia de Covid-19, el cual arrancó el 24 de diciembre de 2020. *** De las 83 millones 936 mil 198 personas vacunadas contra el coronavirus en México, 77 millones 659 mil 769 tienen esquemas completos.
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