Roberto Palazuelos, el admirador de Joaquín el Chapo Guzmán, dijo que cuando él llegara a ser gobernador de Quintana Roo, habría de ajustar cuentas con quienes lo están criticando. En un país donde en un sólo mes, enero, asesinaron a cuatro periodistas, las amenazas de un tipo como Palazuelos, a quien ligan a grupos delincuenciales de la Riviera Maya, es un asunto que se debe de tomar en serio. Fue por ello que miembros de Movimiento Ciudadano, el partido que lo postulará en las elecciones a gobernador de Quintana Roo, lanzaron una alerta por los dichos de Palazuelos. Fue por ello que al llamado Diamante Negro no le quedó de otra que recular.
En su cuenta de Twitter publicó: «Soy un ciudadano luchando por cambiar mi estado y estoy recibiendo ataques del sistema. Eso me hizo cometer un error en una declaración que hoy rectifico: Quiero que el poder público sirva para que nadie viva injusticias ni calumnias. Para que el sistema trabaje para la gente y no en perseguir adversarios políticos. Mi meta es la justicia, no la revancha. Siendo o no Gobernador, tengo derecho legítimo por la vía civil para interponer una demanda civil en contra de quien me difame o me calumnie. Soy un hombre de leyes, respetuoso del derecho y lamento que se haya mal interpretado por lo que reitero una sincera disculpa. Respeto la ley y siempre la respetaré».
Se equivoca Palazuelos al decir que sus palabras se malinterpretaron, directamente amenazó a los periodistas al decir que de llegar a ser gobernador ajustaría cuentas con quienes lo critican.
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