Claudia Guerrero Martínez / El Sistema Estatal Anticorrupción en Veracruz recibe a una cuestionada exlegisladora, Adriana Paola Linares Capitanachi, como secretaria técnica, nombrada el 23 de diciembre de 2021, por un periodo de 5 años, quien a su paso como diputada local por MORENA y presidenta de la Mesa Directiva ha realizado actos de corrupción, desacatos a órdenes federales, así como la aprobación del delito grave de ultrajes a la autoridad; permitir la destitución de Jorge Winckler como fiscal general; elegir a impresentables como magistrados, entre ellos a la prima hermana del gobernador de Veracruz y desaforar a compañeros diputados como Erick Iván Aguilar López, actualmente preso en el Penal de Coatzacoalcos, por un delito no grave, a quien sí le aplicaron venganza política. En esta entrega daremos pormenores de cómo esta nueva funcionaria sigue con las mismas prácticas de imponer a sus parejas sentimentales en cargos trascendentales, como lo hizo en el Congreso de Veracruz.
La expresidenta del Congreso del Estado, Adriana Paola Linares Capitanachi llega a la SEA como premio a sus omisiones legales, actos de abuso de autoridad y corrupción. No conforme con no ser apta para desempeñar dicho cargo, pues el puesto le quedó muy grande, porque no sabe nada del tema y ella dijo textualmente: “Mientras me paguen, lo demás no importa”.
Señalada de ser una mujer déspota, altanera, quien piensa que gritando y diciendo que ella es la jefa, les guste o no, se hace lo que a ella se le dé la gana, con cierto vocabulario vulgar, prepotente y fue como empezó el despido de empleados, asegurando que quien le estorbe en su camino, será despedido. Se evidencia que Adriana Linares Capitanachi trae muchos problemas psicológicos, pues como el mismo Cuitláhuac García, sufren del Síndrome del Poder.
No es un secreto, los conflictos de intereses de Adriana Paola Linares Capitanachi con su asesor en el Congreso de Veracruz y ahora en el SEA, ya hay un nuevo protegido, imponiendo su vida personal a la función pública, pues a esta funcionaria le gusta involucrarse con el personal, siendo una falta de ética por parte de la flamante titular de una dependencia que vigila y castiga los actos de corrupción.
Si bien, Adriana Linares Capitanachi debe vigilar que no haya corrupción en este gobierno estatal, ella los realiza, pues como presidenta de la Mesa Directiva adquirió una casa ubicada junto de la agencia de autos Honda, en Las Trancas, cerca de Xalapa y fue como premio por callar los desvíos de recursos en el Congreso de Veracruz y ser administrados por otro hampón, el diputado y líder de la JUCOPO, Juan Javier Gómez Cazarín. Linares Capitanachi guardó silencio sobre las porquerías que se realizan en el Poder Legislativo y ella se convirtió en cómplice del sistema.
Si bien ya hemos advertido de las protecciones de la exdiputada local Adriana Linares con su asesor en el Congreso de Veracruz, de nombre Juan Carlos Quintanilla Ortega, como lo dimos a conocer con la liga: https://plumaslibres.com.mx/2020/11/09/presidenta-de-la-mesa-directiva-del-congreso-de-veracruz-su-romance-y-el-asesor-estrella/ ahora, la titular del Sistema Estatal Anticorrupción en Veracruz lo vuelve a rescatar y lo incrusta en el SEA, otra vez como su asesor, sin aparecer en el directorio de colaboradores, que por cierto, son muchos. La liga para consultar en: http://seseav.veracruz.gob.mx/2020/10/29/fichas-curriculares/
Lo interesante es que Juan Carlos Quintanilla Ortega no presenta título como Licenciado en Derecho y sin el perfil para el cargo, sólo ser persona cercana a la secretaria técnica Adriana Paola Linares Capitanachi, a quien le dieron este cargo como premio por realizar actos de corrupción y abuso de autoridad como presidenta de la Mesa Directiva y ahora, es la encargada de perseguir los actos de corrupción en el gobierno de Cuitláhuac García. Vaya paradoja.