La tarde del domingo Joaquín Guzmán ya se declaraba ganador de la contienda por la dirigencia estatal del PAN. Lo curioso es que lo pregonaba utilizando a los sicarios y medios informativos que usa el mismo gobierno de Morena. Según Joaquín Guzmán su ventaja era irreversible. Más tarde, ya con el 100 por ciento de las boletas contadas, el equipo de Tito Delfín anunció una ventaja de mil 046 votos, lo que marcaría una ventaja irreversible. Poco después ocurrió algo curioso.
La dirigencia interina del PAN, puesta por mismo Joaquín Guzmán, señaló que hasta ese momento ninguno de los equipos contendientes podía declararse ganado de la contienda. Por cierto, el comunicado del PAN lo distribuyó el mismo equipo de Comunicación de Joaquín Guzmán, lo que hacía parecer un esfuerzo desesperado de quienes habían resultado perdedores. Inmediatamente el triunfo del equipo de Tito Delfín empezó a circular en redes sociales y medios de comunicación.
El mismo exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares felicitó a Tito Delfín, quien cabe decir fue metido en prisión por el gobierno de Cuitláhuac García. ¿Qué sigue? Los de Tito Delfín seguirán pregonando su victoria; los del Chapito Guzmán esperarán a ver qué les indica el gobernador de Veracruz.
Comentarios