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Taxista de Liverpool se da cuenta que pasajero lleva una bomba; salta del taxi, cierra las puertas y explota. Evita que la bomba destruya un hospital

En Inglaterra, desde muy temprano de este lunes 15 de noviembre, se reportó el ataque de una bomba en el Hospital de Mujeres de la ciudad de Liverpool. Un taxista subió a un pasajero que le pidió que se dirigiera a la iglesia Anglicana. Cuando el taxista, de nombre Dave Perry, le informó que las calles estaban cerradas, entonces el hombre le pidió que se dirigiera al Hospital de Mujeres de la ciudad.

Los informes señalan lo siguiente: «Cuando llegó al hospital, Perry notó que el hombre tenía algún tipo de luz adherida a su ropa y estaba jugando con ella. Saltó y cerró el coche con llave». En el momento que Dave Perry saltó del vehículo la bomba explotó con el terrorista suicida adentro. Dave Perry, el taxista que es considerado un héroe, sólo recibió una herida en la oreja y algunos golpes al saltar del taxi.

Sin embrago, de haber explotado la bomba en las instalaciones del hospital seguramente hubieran sido decenas las víctimas. Gracias a la valentía de Perry, así como a su heroísmo, se evitó una gran tragedia. Ya hay cuatro detenidos por este atentado terrorista que tiene conmocionada a la sociedad británica.

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