Sin embargo, los maestros no se tragan ese cuento, ya que se sabe que el grupo de rodea a Cepeda Salas ya advirtió el riesgo que corren de perder el control del sindicato, ya que se han percatado del ambiente de descontento que prevalece entre las bases magisteriales, que tenga por seguro que no dudaran, en dar un voto de castigo a una dirigencia timorata y abyecta al gobierno federal. Desde luego que para taparle el ojo al macho, la actual dirigencia disfrazo el aplazamiento de renovación de secciones sindicales, el mismo Cepeda Salas señaló que esto se debe a que no habría la posibilidad de hacer el cambio de las directivas seccionales en tiempo y forma. Lo curioso del caso es que esta determinación sería turnada al Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, para la toma de nota correspondiente.
Pues mientras son peras y manzanas, el SNTE de Cepeda Salas recula en su pretensión de renovar las secciones sindicales. Por lo pronto la disidencia agrupada en el Movimiento Nacional de Transformación Sindical, que dirige Ricardo Aguilar Gordillo, y en la organización, Maestros por México, comienzan a contar sus canicas, para darle batalla a un dirigente empecinado en meter mano a los comicios magisteriales. ¡Lo cierto es que, Alfonso Cepeda Salas, no las tiene del todo seguras!