Alberto Calderón P.* /
El árbol de la vida xalapeña.
Es sobresaliente lo que una mujer como Sinforosa Amador hizo, una vida dedicada a su familia, dejando un legado que sus descendientes dieron a la cultura y a la ciencia en nuestra ciudad.
Nacida en nuestra patria el 18 de julio de 1788, antes de que esa parte del territorio del norte de California perteneciera a los Estados Unidos.
Sus padre fue Pedro Amador nacido en 1739 en Cocula, Jalisco, se le conoció como soldado, fue herido en 14 ocasiones por las flechas indias, posteriormente se dedicó a la ganadería y a la minería, se casó con María Ramona Noriega en 1760. Tuvieron once hijos y todos ellos aprendieron a leer y escribir, una gran hazaña para la época.
Hablaremos de dos de ellos: Sinforosa y José María. La primera contrae nupcias por primera vez con el artillero español Miguel Mendoza, con quien procrea cinco hijos, muere su conyugue y al enviudar se traslada a la Villa de Xalapa en 1814. Su vida comienza a destacar en estas tierras por haber traído a inicios del siglo XIX la herencia cultural de los misioneros jesuitas europeos. Contrae segundas nupcias con el doctor cubano José María Pérez Oliva y Sabana, que recientemente había llegado a Xalapa en una especie de campaña de vacunación expedicionaria llamada “Balmis”, en referencia al médico español Francisco Javier Balmis, fue un acto filantrópico que duró de 1803 hasta 1814 prácticamente once años, es en ese último año cuando pisa estas tierras con aroma a jazmín. Su objetivo era inocular la vacuna de la viruela para alcanzar todos los rincones del imperio español en esa época, debido a la alta mortandad del virus en miles de niños.
Del primer matrimonio de Sinforosa nacieron cinco hijos, Ángela Mendoza Amador, contrae nupcias con Antonio María de Rivera, abogado, alcalde. Durante su mandato se construyó el Paseo al Camino de Coatepec del cual aún existen antiguas bardas con asientos circulares de piedra. Diputado, jurista y magistrado varias veces, presidente del Tribunal, estudió arquitectura. Su legado fue el establecimiento del Colegio Preparatorio de Xalapa, (prepa Juárez).
Del segundo matrimonio de Sinforosa nacen tres hijos, el menor se llamó Juan José Pérez Amador, éste se casa con Sofía Rivera Mendoza, hija del matrimonio formado por Antonio María de Rivera y Ángela Mendoza Amador, ¡sí!, se casa con su sobrina.
Gran parte de los descendientes de Sinforosa fueron destacados xalapeños como su hija Montserrate Pérez Amador, quien se casó Manuel María Quirós, al quedar viuda estableció en su casa en la Calle de la Amargura, hoy Revolución, una escuela en donde enseñaba a leer e impartía instrucción a niños y niñas. De sus descendientes tenemos a María de los Ángeles Quirós Pérez; ella se casó con Alonso Güido y Acosta quien fuera gobernador en substitución de Juan de la Luz Enríquez en más de diez ocasiones. Y a Concepción Quirós Pérez, directora fundadora de la Escuela Superior para señoritas, actual Escuela Industrial del mismo nombre.
José María Amador, mencionado anteriormente, en 1848 debido a la exitosa extracción de oro en la zona norte de California establece un campamento con varios nativos norteamericanos, que es la actual ciudad de Amador City ( significa “el que ama”) en el condado de Jackson.
Como podrán apreciar este es parte el árbol genealógico que dejaron los descendientes de aquella elegante y preparada dama dejando una estirpe importante sus descendientes.
*Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores (REVECO).