Sin embargo, en uno de esos tantos días que salieron juntos, el joven de 25 años decidió echarle algo a su cerveza, pues el taxista le comentó que de ese día no pasaba, que quería tener relaciones con sexuales él. “Decidí mezclar ketamina en su cerveza porque dijo que de ese día no pasaba (que iba tener relaciones conmigo); yo quería que pase algo entre nosotros dos, quería tener relaciones con él, pero no estando mareados”.
Tras esto, Giancarlo Paolo Sánchez Suárez remató su amigo aplicándole la eutanasia y ya para finalizar, lo descuartizo. “Creo que si no hubiera hecho esto no estuviera aquí, mal por mi familia, por la familia de él que los vi en la televisión. Eso me asustó. No sabía qué hacer. No le comenté a nadie de lo que hice”, concluyó.