Desde hace décadas, muchos analistas sobre el tema del narcotráfico saben que no hay autoridad estatal o municipal en Sinaloa, que no pacte con los cárteles del narcotráfico para poder mantener las cosas en relativa paz en ese estado. Así fue en el gobierno de Juan S. Millán, Aguilar Padilla, Mario López Valdez (Malova). Quirino Ordaz no pudo ser la excepción. ¿Recuerda usted la balacera en Culiacán, ese 17 de octubre, cuando se detuvo a Ovidio Guzmán, hijo del Chapo? Curiosamente el gobierno de Quirino Ordaz, como si supiera que por la tarde habría lluvia de balas, mandó un comunicado de Protección Civil suspendiendo las clases en el turno vespertino, que porque se pronosticaba la presencia de una zona de baja presión.
¿Usted recuerda la lluvia ese día en Culiacán? En las elecciones de junio de 2021 en Sinaloa, el ganador fue Rubén Rocha, candidato de Morena, quien ya había contendido para la gubernatura, pero que perdió. Curiosamente ganó en el municipio de Badiraguato y otros más controlados por el Cártel de Sinaloa. Después de perder Rubén Rocha se hizo jefe de asesores del gobernador Quirino Ordaz; de ahí pasó a ser candidato de Morena a la gubernatura.
Quirino entregará la estafeta a quien fue su jefe de asesores. Estos datos y más generan suspicacias y hacen pensar que la cuna de los cárteles del narcotráfico en México quedó en manos de Morena, o mejor dicho, Morena en Sinaloa y el gobierno quedaron otra vez en manos del Cártel de Sinaloa. Y el presidente premia a Quirino Ordaz con una embajada en España, por haberle entregado el estado.
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