Eso también lo explica Xóchitl Gálvez: “Varios de los senadores y senadoras fueron a apoyar a su coordinador en algo que asumían que él había evaluado”. De alguna manera Julen Rementería engañó a sus compañeros de bancada, abuso de su buena fe y los embarró con su porquería. Cierto, Julen ya se disculpó, pero esas disculpas no son suficientes. El mismo Raymundo Riva Palacio compara la presencia de Julen como coordinador de los senadores del PAN en el Senado, como una pierna con gangrena que se debe de cortar.
Dice Riva Palacio: “Lo que provocó su coordinador no desaparecerá con los días. Su torpeza fue política, cultural e histórica. Un siglo les cayó súbitamente encima”. Para muchos está claro que un coordinador que no puede distinguir lo nocivo de ciertas figuras políticas, no puede estar al frente de los senadores panistas.