Señala Salvador García Soto en su columna de El Universal: “La empresa noruega-alemana DNV Energy Systems México presentó una denuncia penal para acusar que un paquete de sus muestras de la obra de la Línea 12 del Metro que fueron enviadas para su análisis a Estados Unidos fue violado, que abrieron el embalaje que contenía las muestras para el peritaje y que además se rompió la cadena de custodia judicial, porque en el paquete que recibió en sus oficinas el pasado 30 de agosto no contenía el registro de la citada cadena de custodia y sus muestras habían sido violadas y abiertas”.
Por supuesto, la pregunta inmediata es, ¿quién hizo eso? ¿Quién violó los sellos y alteró las pruebas? El articulista se responde: “Y ahí entran muchos actores, desde las empresas constructoras de la obra, las administraciones que contrataron y ejecutaron la obra, pero también la actual administración del gobierno de la CDMX que era responsable del mantenimiento de la obra que se derrumbó causando la muerte de 26 personas”.