Se pusieron de pechito. El presidente López Obrador no baja de conservadores a los panistas, sus adversarios todavía los vinculan con “El Yunque” y algunos se han atrevido a decir que el fascismo se ha infiltrado en algunos sectores del panismo. ¿Qué hicieron los panistas para contradecir esas afirmaciones? Pues reunirse con el líder ultraderechista del partido Vox de España, Santiago Abascal, y no sólo eso, llevarlo al Senado y firmar con él un acuerdo para «combatir el avance del comunismo en la iberosfera». Pero, ¿quién es Santiago Abascal, el líder de Vox?
El periodista Luis Méndez de España lo describe de la siguiente manera: «El dirigente de Vox, Santiago Abascal, representa al sector más duro de la derecha española, algo que parece asumir sin complejos de ningún tipo». ¿Acaso no se lo dijo “Tumbaburros” (Luis Alberto Rosas) al burro de Julen Rementería? Debió decirle más.
Señala Luis Méndez en su artículo: «Sus referencias xenófobas y antifeministas no sólo le han granjeado las críticas de la izquierda española y amplios sectores de la población. También despiertan el recelo del PP y, sobre todo, de Ciudadanos (Cs), el partido de centroderecha que observa con prevención algunos de los postulados más exagerados de Abascal». En serio senador Julen, ¿cómo le puede hacer caso a un influencer pendejo que se hace llamar “Tumbaburros”. Sólo nos queda suponer que, si algún burro tumbó el sujeto ese, pues fue a usted.
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