A esta información anexaron que, tras el ataque se enviaron soldados de la Secretaría de la Defensa Nacional de las regiones militares de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, así como de la Agencia de Investigación Criminal, de la Policía Civil de Coahuila, de la Policía Especializada y de cuerpos de seguridad de los municipios cercanos como refuerzos. Sin embargo, los esfuerzos por atraparlos fallaron pues, tras un enfrentamiento de aproximadamente 40 minutos, los civiles armados huyeron rumbo a Anáhuac, del vecino estado de Nuevo León.
Los hechos dejaron un saldo de tres efectivos de la policía heridos y una patrulla dañada, desconociendo el total de heridos civiles. Ante la situación, la Secretarias de Seguridad concluyó mencionando que desde que los criminales huyeron «se inició un operativo por tierra y aire por parte de corporaciones de los diferentes órdenes de gobierno para dar con su paradero, mismo que podría prolongarse hasta el día jueves».