De acuerdo con las investigaciones el exrector Derbez, junto con un grupo de colaboradores, «crearon una serie de empresas, entre las que se encuentra la sociedad denominada ULAP Jenkins Graduate School, compañías que tienen como socios al propio ex canciller y a su círculo más cercano».
Por medio de esta sociedad estuvieron recibiendo pagos millonarios. Pero esta sólo es la punta del iceberg, pues entre los acusados también están los abogados de la familia Jenkins, quienes, a través de su fundación, recibieron sumas por hasta 15 mil millones de pesos.