El joven marinero de aproximadamente 25 años, residente de la isla, pidió prestada la lancha al dueño para llevar de paseo a sus familiares. La familia había comido en Isla Mujeres después de terminar un primer recorrido en Playa Tiburón. Después de un rato volvieron a salir en la embarcación. Cuando pasaron Punta Sur, en un conocido cruce de corrientes, el motor falló y quedaron en mar abierto a merced del clima.
Minutos después, una ola los golpeó y la lancha se volteó. El joven marinero alcanzó a nadar hasta la orilla para pedir ayuda. A pesar de que se salvaron diez personas, las tres víctimas fueron su exesposa, su sobrino y uno de sus primos.