Por supuesto, la exigencia era hacerla responsable, pues ella, citando sus palabras, solamente era la directora del Metro; casi nada. La tarde de este lunes 28 de junio, finalmente Claudia Sheinbaum pidió la renuncia de Florencia Serranía, poniendo en su lugar a Guillermo Calderón Aguilera, de quien dijo: «Es un servidor público honesto que va estar hoy al frente del Sistema de Transporte Colectivo Metro, y como encargado del despacho (del Servicio de Transportes Eléctricos) se queda Martín López Delgado».
Sobre el incendio de la subestación Buen Tono, Florencia acusó que se debió a falta de mantenimiento, algo que ella debió haber ordenado. En la tragedia de la Línea 12 el gobierno de la CDMX quiere focalizar el problema a la falta de mantenimiento; eso haría más responsable a la pobre de Florencia.