En 2016 el secretario de Justicia de Puerto Rico acusó a estos tres académicos de utilizar algunas instituciones del tipo de la Academia Mundial de la Educación para malversar fondos. César Miranda detalló que CRECE-21 no fue el único programa en el que se utilizaron fondos de forma fraudulenta: «Lo mismo ocurrió con los programas de Desarrollo Profesional para Maestros del K-3, Desarrollo Profesional para Maestros de Escuela Superior, Innovación en la Enseñanza de la Lengua Materna y la Cumbre Iberoamericana de la Honorable Academia Mundial de la Educación».
En 2014 el Diario Cambio de Puebla señalaba que la Honorable Academia Mundial de Educación, junto con el Ilustre Consejo Internacional de Excelencia en Educación que otorgaba el título de “Ilustrísimo Caballero de la Educación” al entonces gobernador Moreno Valle, «son dos instituciones con origen en Perú ligadas al fraude en la entrega de títulos y reconocimientos académicos en ese país». Pues esta es la institución “patito” a la que el secretario de Educación, Zenyazen Escobar, con recursos de los veracruzanos, le compró un título espurio para alimentar su devaluado ego.