Ante lo ocurrido a la mujer se le rompió el corazón, se encontraba ahí con el vestido blanco de novia, esperando a que su prospecto llegara. El novio nunca apareció. La novia se mostró consternada y preocupada ante el hecho de que su prometido no apareciera. Al ver que la pobre mujer sufría, los familiares idearon una inusual manera de que la boda continuara. Los familiares comenzaron a decirle a la novia de que se casara con alguno de los asistentes, aprovechando que todo estaba listo. Le sugirieron que escogiera a uno de los padrinos.
Y así fue como la mujer seleccionó a uno de sus padrinos, no sin antes hablar con él y la familia del hombre para conocer la opinión que tenían respecto al matrimonio precipitado de último momento. El novio que no llego, no podrá estar muy tranquilo, pues la familia de la novia interpuso una demanda en su contra.