Los vecinos alertaron a la policía, la cual detuvo a los presuntos ladrones. Sin embargo, los pobladores de Coacoatzintla querían que las autoridades les entregaran a los ladrones para poder lincharlos. Los ladrones, quienes estaban en la comandancia de policía, fueron exhibidos para ver si con eso se lograba calmar la furia de los pobladores; cosa que no sucedió. Ante esto, los pobladores incendiaron un auto cerca de la carretera.
De acuerdo con los informes la situación sigue siendo grave, tanto más que los pobladores están hartos de los negocios del esposo de la alcaldesa, Jacinto Urrea, quien ahora quiere ser el heredero del poder de su esposa Alma Guadalupe Maravert. Pero el caso es que, por estar tan preocupados por la elección, han descuidado la seguridad de Coacoatzintla.