Los medios de comunicación de Japón informaron de una subida del mar de aproximadamente un metro y medio de altura registrada pocos minutos después del temblor en Miyagi, alertaron de que podrían producirse sucesivos maremotos de mayor altura. Es un amanecer trágico para el país de Japón, a pesar de que en ese continente se llevan a cabo más temblores que en otros países, las personas aún no se acostumbran a vivir con el miedo de ser devorados por el mar.
Cabe señalar que, el pasado 14 de febrero del 2011, se produjo otro temblor de magnitud 7.3 en la escala Richter frente a la costa de Fukushima, según los expertos, este pudo tratarse de una réplica.