Tal vez el Órgano de Fiscalización Superior de Veracruz sea una tapadera, pero la Auditoría Superior de la Federación no. La ASF ya dejó en claro que el gobierno de López Obrador tiene múltiples irregularidades, tanto en proyectos como en programas sociales. Por supuesto, Veracruz, con un gobierno tan atípico, no podía quedar fuera del escrutinio de los auditores. Particularmente la Secretaría de Educación de Veracruz. La ASF detectó en el ejercicio 2019 un presunto daño patrimonial por 62 millones 400 mil pesos.
Este monto se utilizó, entre otras cosas, para pagar a aviadores, que no sólo no se han combatido en esa dependencia, como anunciara el secretario de Educación, sino que con su pago los siguen fomentando. Pero no sólo eso, parte de ese dinero también fue para comisionados del SNTE, lo que indica que los contubernios con el sindicato de la Sección 32 sigue; por supuesto también los negocios entre ellos.
¿Nos preguntamos si el gobierno de Morena revivió al Equipo Liderazgo Mexicano? Un AC que la 32 utilizaba para saquear el dinero de las cooperativas escolares. Otra de las irregularidades que detectó la ASF fue que se estuvo pagando a maestros fallecidos. ¿Dónde está ese dinero? La SEV tendrá que hacer malabares para justificarlo.
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