Virginia Durán Campollo / Mientras los partidos políticos nacionales arman una gran carpa, la población mexicana es víctima no solo del Covid sino de muchas más enfermedades. Los cientos de miles de muertos y contagiados por la pandemia, sumarán a las víctimas de la tuberculosis, diabetes, sida, cáncer y demás. Un gran cementerio, en espera de sus muertos. La insensibilidad mostrada, es de preocupar. No ven, sienten, inquieta la verdadera tragedia del país. Mientras las sombras se alargan, el gobierno vive en el mundo feliz de otros datos. Un gabinete compuesto por grises personajes, que no han dado ningún resultado. Vienen las elecciones y se empiezan a mover, en lo que son diestros: las desprestigiadas acciones electoreras. El gobierno en el poder en acción. A las órdenes del emperador. Ciegos y sordos al reclamo de la nación, los usos y costumbres al respecto se activan. Dilapidan el dinero a manos llenas y se publicitan mentiras con descaro. El Estado regido por un solo hombre, está en juego. Se da sin distingos y medida. Sus “siervos de la nación”-vasallos de AMLO- nutriendo las campañas a través de las vacunas.
*** Por otro lado, los movimientos políticos en la asignación de candidatos. Elección de diferentes personajes –de varios sectores sociales- que no tienen ni idea de que se trata la administración pública. Olvidan a quienes pagan las campañas, los contribuyentes, y les ofenden con pretensiones que llevan a la indignación. Los incautos pretensos, declaran sin rubor alguno no entender a que van, pero confiar en el partido que les representa. Es una bofetada de desprecio a la ciudadanía y ofenden su inteligencia. Hoy más que nunca México necesita de mujeres y hombres íntegros, con voluntad política y responsables para la gigantesca obra de rescatar al país y lo cual llevará varios años. Cuitláhuac García, Cuauhtémoc Blanco, Miguel Barbosa- entre muchos otros MORENOS- son nítidos ejemplos negativos de ese error. El desprecio a las mujeres mexicanas, al imponer a un violador de cinco de ellas, como candidato a gobernador. No más funcionarios públicos corruptos, violadores, drogadictos, alcohólicos, ineptos, omisos e ignaros.
*** Pensemos muy bien nuestro voto. No habrá otra oportunidad. Es el momento de cambiar el curso del desastre, en todos sentidos, que nos abate. Hagámoslo por nuestro bienestar, tranquilidad, paz y desarrollo. Si no se aplaca a estos vándalos en el poder, nos arrepentiremos de por vida.
*** Y para las agruras del mole…usted sabrá qué tomar. Hasta la próxima.