En Youngsville, Carolina del Norte, se ha dado a conocer el caso de un matrimonio enfermiso, el cual hacía videograbaciones sexuales donde los participantes eran niños. La mujer era una empleada del Sistema Escolar de Lafayette. El caso se dio a conocer debido a que la policía de dicho lugar recibió la llamada de una persona desconocida. En la llamada informaban sobre un estudiante de intercambio extranjero que estaba teniendo una relación sexual con su maestra.
Los oficiales decidieron investigar al estudiante, descubriendo que Kimberly tuvo sexo con el jovencito de 15 años. Los agentes afirmaron que Jeffery, el esposo de la sospechosa, tenía conocimiento de lo que la docente hacía, sabía acerca del sexo entre la docente y su alumno.
Los oficiales descubrieron que tanto la mujer como su marido suministraron marihuana al menor. Le dieron de fumar y tomaron alcohol en su residencia. El sujeto disfrutaba ver teniendo a su mujer teniendo relaciones sexuales con otro. Mientras la docente realizaba los actos impúdicos su marido la videograbava.
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