Su madre vivía a un lado de su domicilio en Olive Hill, Kentucky, el hombre no soportaba el control que su madre tenía sobre él. Billy Reynolds tenía pensado asesinar a su madre desde hace varios años atrás, más nunca llevaba a cabo el crimen.
Tras la investigación una de las hipótesis fue que el profesor se quería quedar con la herencia de la madre, pero al revisar más a profundidad el caso, los agentes descubrieron que Reynolds quería asesinar a su progenitora por el simple hecho de que ya no la soportaba. El hombre se entregó a la policía declarando el crimen de su madre, alegando que lo hizo y lo volvería las veces que fueran necesarias.