Pero había una toma que no pertenecía a la joven embarazada, si no a su vecina, la cual se estaba robando el agua. La molesta mujer atacó a la que se estaba robando el agua con un arma punzocortante generando heridas de gravedad.
En la pelea la mujer que estaba en gestación hirió a su contrincante pero también se llevó un fuerte golpe que podría resultar de gravedad. Tras la llegada de los policías y tras entrevistar a la mujer embarazada esta dijo que la había atacado porque si es capaz de robarse el agua, es capaz de robar maridos.
