En días pasados se reportó que la empresa suiza Vitol reconoció haber dado sobornos a funcionarios de Pemex para obtener contratos. El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha reiterado hasta el cansancio que su gobierno no es igual que los anteriores, que él no es corrupto, que él es honesto. Que estas prácticas en Pemex, la de los sobornos, continúe, pone en entredicho la honestidad de la Cuarta Transformación.
¡Las prácticas de corrupción de los gobiernos anteriores se siguen dando! ¿Qué pasa? De acuerdo con información de Bloomberg, «Petróleos Mexicanos, está imponiendo una prohibición temporal informal para hacer negocios con Vitol». Al parecer la orden provino de Ulises Hernández, el director general de la rama comercial conocida como PMI.