Jorge Flores Martínez / Festejo que en un ambiente políticamente tan complicado como el actual los principales partidos de oposición encontraran los argumentos mínimos para llegar a un acuerdo para formalizar alianzas electorales. Entiendo perfectamente que un invitado a la mesa de negociaciones fue el señor miedo a perder, este invitado, estoy convencido, fue determinante a la hora de negociar.
Saben que su futuro como partidos pasa por el 2021, no tienen mucho y lo que les queda lo desean mantener. Por lo que entiendo, esta alianza se dará en los distritos donde los tres partidos aliados, PAN, PRD y PRI, tienen muy pocas posibilidades de ganar por su cuenta y la suma de ellos puede ser competitiva o incluso revertir la ventaja que tenía morena hasta hace un par de días.
Cualquier encuesta que se publique en medios me causa un grado de desconfianza, es el actuar de los políticos lo que da un poco de luz a la realidad, son sus actos los que demuestran claramente los pronósticos que ellos mismos tienen en este momento del termómetro electoral de país. Me voy a explicar, morena estaba tranquila con la dispersión del voto, saben que los números le alcanzan para mantener la Cámara de Diputados, que es lo único que realmente les interesa, para lo demás tienen otras herramientas de presión política. Mientras que el PAN, PRD y PRI, tienen claro que difícilmente por su cuenta podrán mantener lo que tienen, podrán jugar con sus gobernadores pero eso no les alcanza.
La estrategia es jugar juntos en los distritos donde tienen pocas posibilidades de ganar, le echaran toda la carne al asador en la elección de los diputados federales. Los locales y alcaldes serán figuras que jalen votos a los diputados. Saben que juntos suman lo suficiente para ser competitivos.
El rechazo a la alianza que mantiene el partido en el poder es natural, no podría ser de otra forma, su discurso de la oposición moralmente “derrotada” los descubre. Ellos como partido no quieren ser gobierno, lo que desean es que cualquier opción a ellos se encuentre moralmente derrotada. Parece extraño, pero en su naturaleza no está gobernar, su proyecto se construye en la idea de ser los únicos posibles o moralmente dignos para el electorado, no les interesa competir, su deseo es ser monopolio electoral.
Me gusta cuando los partidos políticos son forzados a negociar, ya sucedió en 1988 y el resultado fue una izquierda mexicana que se atrevió ser un poco más moderna, no lo suficiente, pero pasamos de partidos ideologizados a una izquierda relativamente más pragmática y realista como opción para el votante.
También me gustan que las alianzas entre partidos que representan extremos del espectro político logren propuestas más cercanas al centro, que curiosamente, es donde estamos la mayor parte de los votantes. Eso me agrada y lo celebro.
Ahora vendrá la parte más complicada para los partidos aliancistas, construir candidatos interesantes para el votante. Candidatos y candidatas que no refuercen la idea del prian, candidatos con contacto y agenda ciudadana. Espero que tengan claro que a los ciudadanos no nos importan mucho sus logos lindos y slogans pegadores, lo que queremos son candidatos que ofrezcan soluciones concretas y una trayectoria de confianza e integridad.
Menos mitin y más diálogo.
Recuerden, ya estamos cansados de lo mismo.
Este jueves 10 a las 19:30 hrs. tenemos un foro en HABLEMOS DE XALAPA con los partidos de nuevos, veremos que propuestas tienen para nuestra ciudad. Los espero.
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