Fue una llamada anónima la que denunció que, en Puerto Marqués, dentro de la franja turística de Acapulco, Guerrero, se estaba llevando a cabo una fiesta de XV años. Vaya usted a saber a qué hora se hizo la denuncia, el caso es que las autoridades llegaron a las 24:00 horas, después del vals, después de la partida del pastel y después del mole. La policía dispersó a unos 500 invitados que durante la tarde, supuestamente habían pasado desapercibidos.
Los elementos de seguridad exhortaron a los asistentes a que se retiraran; algunos de ellos dijeron que sí, que ya era hora de irse a casa y que la fiesta, que debió empezar horas antes, estuvo muy buena. En el tardío operativo participaron efectivos de la Guardia Nacional, del Ejército, Policías Turísticos, Preventivos, así como personal de Protección Civil.
Vale señalar que, aunque parezca oportuna la intervención de la policía, realmente hacer un operativo a las 12 de la noche para detener una fiesta que empezó desde horas antes parece vacilada. Muchos podrían pensar que se pusieron de acuerdo con las autoridades para que les permitieran la pachanga hasta la medianoche.
Comentarios