Por supuesto, los mexicanos sabemos que esto último, es contrario a lo que han estado haciendo Hugo López-Gatell y el mismo presidente de la República. Sin embargo, algo que ya no sorprende dado el grado de cinismo con que se ha desempeñado López-Gatell en los últimos meses, es que el subsecretario de Salud ni siquiera se dio por aludido.
En su conferencia vespertina dijo: «La sociedad debe reaccionar también frente a esto. Es decir, el doctor Tedros no es que me lo diga a mí, si me lo quisiera decir a mí a lo mejor, o al secretario de Salud o al presidente, quizá habría mandado un comunicado diplomático si fuera el caso». Vaya sujeto, quiso pasar a la historia como un prócer de la Salud y terminó siendo un charlatán.