Casi un año después, unos meses antes de las elecciones, en el estado de Nuevo León dijo: «Vamos a bajar los sueldos a los funcionarios de los más altos niveles, porque vamos a aumentar los salarios del pueblo: van a ganar más los maestros, las enfermeras, los médicos, los policías, los soldados, los marinos».
Y para rematar, el 12 de octubre 2018, ya como virtual presidente señaló: «El que trabaja en el gobierno federal como policía, maestro, enfermero, y que gane menos de 20 mil pesos, va a tener un aumento por encima de la inflación». Esa promesa, a dos años del gobierno del cambio, sigue pendiente. Ni Alfonso Cepeda ha logrado un incremento salarial digo y ni el presidente de México ha cumplido lo que prometió en reiteradas ocasiones. No cabe duda que, de promesas está lleno el mundo.