El vendedor suplica: “Solo uno que me compre señor. Échame la mano. Sólo esta vez, sólo esta vez señor, no se vende, apóyeme. Tengo mucho problema económico señor. Por favor gobernador”. Cuitláhuac García prefiere no escucharlo, le dice que para la próxima y se aleja. ¿Qué pasó con Cuitláhuac García que perdió esa cualidad humana que se llama empatía? ¿Por qué tanta indolencia? ¿Por qué tanta indiferencia? ¿Por qué esa insensibilidad? Hace unos días el gobernador de Veracruz dio su Segundo Informe de Gobierno, en ese informe dijo que estaba trabajando para beneficio de los veracruzanos.
La escena que vimos en el video es una muestra contundente de que al gobernador los veracruzanos le valen madres. Los veracruzanos necesitados son un pinche fastidio con el que es mejor no toparse. “Para la próxima”, le dice el gobernador a una persona que le suplica ayuda. Todavía están esos espectaculares donde se ve a Cuitláhuac García abrazando a una anciana. ¡Qué buena gente el gobernador! Sabe, después de lo que acabamos de ver, mejor retírenlos.