Tras la muerte del candidato, el fiscal general de Dakota, Wayne Stenehjem, explicó que aún podía participar en el proceso electoral, pues el voto por correo y el voto en el extranjero llegaron con varios días de antelación; incluso antes de que él falleciera.
Sus compañeros de partido se encuentran tristes por no poder darle la buena noticia. Todos lo que lo conocían dijeron que a David Andahl le hubiera dado mucho gusto saber que había resultado triunfador. Señalaron que su trágico contagio se dio durante la campaña.