“Yo dije seguro se le raspó la llanta, se le cayó la facia porque el golpe si sonó duro, me bajo del coche, lo inspeccionó y yo veo que todo bien y no se me hizo un acontecimiento por el que yo tuviera que llamar a la policía”, recordó el youtuber.
Al no levantar un reporte policiaco, el influencer tuvo que pagar los daños del automóvil por diez mil dólares, o de lo contrario no le regresarían su pasaporte mexicano. No obstante, y gracias a sus amigos y novia pudo pagar la cuota. Al cabo de unos días, la factura le llegó por correo y al final tuvo que pagar veinte mil dólares, cerca de 418 mil pesos. Pero cuál problema, la factura la pagarán los imbéciles que lo siguen en su canal.
