García Jiménez tan indolente como Javier Duarte

Carlos Jesús Rodríguez Rodríguez / ¿PODRÍA HABER un acto más criminal de un gobierno estatal que la muerte de niños –y adultos- con cáncer que podrían ser evitables, si no prevaleciera esa demente tendencia al ahorro que obstaculiza la adquisición de los medicamentos indispensables, hasta incurrir en subejercicio, con tal de complacer a la administración Federal y retornarle recursos para que siga comprando votos clientelares?. En cualquier nación –sobre todo donde el derecho a la salud está contenido en la Constitución-, los fallecimientos de seres humanos a quienes se niega el acceso a retrovirales, la indolencia oficial sería catalogada como crimen de lesa humanidad, pero en México todo se dispensa cuando un Presidente y un Gobernador sometido son del mismo partido, y la conservación del poder está por encima del bien común. En Veracruz desde que inició la administración de Cuitláhuac García Jiménez escasean los medicamentos para atender a niños con cáncer, lo que ha motivado que médicos y padres de familia se lancen a las calles y convoquen a la sociedad a ayudar para la compra de estos ante la inoperancia y tacañería del Sector Salud y del Gobierno del Estado a quienes la población enferma les importa un bledo, porque si no fuera de esa manera, la Entidad no tendría por qué haber incurrido en un subejercicio de 4 mil millones de pesos en 2019 que fueron regresados a la Federación, cuando las necesidades del sector son elevadas, sobre todo en males como esos sin considerar la ausencia de retrovirales contra el VIH/Sida, influenza, dengue y otros males.

PORQUE EN efecto, el propio gobernador Cuitláhuac García Jiménez reconoció en Enero de este año que su gobierno dejó de ejercer 4 mil millones de pesos del presupuesto autorizado en 2019, aunque juró y perjuró que no se trataba de un subejercicio, pero en sus galimatías terminó aceptando que el subejercicio equivaldría a 0.7 por ciento de los 128 mil millones 361 mil pesos aprobados para el Estado el año pasado, “es decir, casi cero de subejercicio”, un acto realmente criminal si se tienen tantas necesidades, y cuando médicos y padres de familia salen a las calles a clamar ayuda. Pero con todo lo anterior, el mandatario estatal tuvo la desfachatez de argumentar que su gobierno realizó un ahorro de 29 por ciento en el gasto de materiales de suministro y otro de al menos 42 por ciento en servicios generales, y mientras eso ocurría, los niños que podrían haber salvado la vida si se contara con los insumos, morían por negligencia e incumplimiento de un deber, en un acto tan criminal como el rellenar frascos con agua oxigenada, como dicen que ocurría en el gobierno de Javier Duarte de Ochoa.

AHORA EL gobernador se defiende y echa la culpa a las farmacéuticas, y argumenta –como si eso fuera un argumento- que el desabasto de medicamentos oncológicos que registran los hospitales de Veracruz es debido a que no se ha logrado realizar la compra consolidada, “pues farmacéuticas y ex proveedores buscan ´bloquear´ las adquisiciones del Gobierno Federal”, una salida por demás insulsa y propia de un sujeto que nunca debió ser gobernador, pero que la sociedad dolida por la corrupción y gracias al arrastre de AMLO se trepó (creo es la palabra adecuada) a un cargo para el que no estaba capacitado y, peor aún, no le interesa capacitarse mientras venga el Presidente a decir que es el mejor y el más honesto, y cómo no, si le devuelve el dinero del presupuesto para que lo siga repartiendo a quien garantice seguir votando por MoReNa. Y es que hace unos días, el oncólogo Sergio Miguel Dorantes, de la Torre Pediátrica de Veracruz, denunció la ausencia de medicamentos y convocó a la sociedad a realizar una cruzada para reunir los recursos y poder adquirirlos, ya que están muriendo niños que no debían morir, por lo que ahora Cuitláhuac sale a decir que ya se hizo la compra de lo faltante. Y como siempre en la Cuarta Transformación hay un pretexto para justificar lo injustificable, el titular del ejecutivo dice que el Gobierno Federal detectó que se hacían negocios con la compra de medicamentos, y al combatir las corruptelas hubo empresas que quisieron “bloquear” las compras consolidadas y se aliaron con ex proveedores. En el caso del material oncológico, insiste, es uno de los que más extrañamente ha escaseado y no nos han podido otorgar la compra consolidada. “Espero que detrás de eso no estén personajes políticos que antes eran proveedores, había uno del ISSSTE y espero no sea ese tipo de acciones”, pero apocadamente no se atreve a dar nombres, cuando el único culpable de que no haya medicamentos en estos momentos es su gobierno que ya lleva 1 año y 10 meses en el poder y sigue buscando culpables en el pasado, negándose a asumir una responsabilidad que le compete. Fiel a su patrón, dice que existe una intención de “bloquear” las compras consolidadas que evitarían “pedir de a poquitos” con los proveedores locales, “ya que se tocaron intereses de corrupción, de manejos que se hacían con los medicamentos y algunas empresas farmacéuticas se aliaron con los que hacían estos negocios y trataron de bloquear al gobierno; no lo lograron, y buscamos alternativas”, (y acaso le faltó decir: pidiendo a Dios no encontrarlas, ya que en el mundo hay muchas maneras de comprar los medicamentos pero la realidad es que se carece de voluntad).

Y ES que según Daniel Castro Carranza, presidente de la fundación “Cancela el Cáncer”, en Veracruz hay desabasto de al menos cuatro medicamentos contra esos males que son la médula espinal de las quimioterapias. Con todo y ello, denuncia que el sistema de salud les está diciendo “te toca este medicamento pero no tenemos la posibilidad de dártelo”, pero los costos son muy elevados, por lo que al menos ocho personas se han acercado a la fundación para buscar apoyo para adquirirlos. Vamos, es tan grave el problema que en el área de oncología hay al menos 40 niños que necesitan tratamiento o morirán.

Y MIENTRAS esto sucede, hasta Junio del año en curso Veracruz registraba un subejercicio de 72 mil 157.4 millones de pesos que representan el 46.28 por ciento de los recursos disponibles del presupuesto estatal que asciende a 155 mil 900.6 millones de pesos para el ejercicio 2020. De acuerdo al Segundo Informe Trimestral de Finanzas Públicas correspondiente al periodo de Enero al 30 Junio, del presupuesto estatal se habían devengado apenas 83 mil 743 millones, con lo cual quedan pendientes 72 mil 157 millones de pesos por ejercer y que no saben en qué lo van a aplicar. El Poder Ejecutivo registra un subejercicio de 38 mil 602 millones 793 pesos, pero 13 de las 17 dependencias estatales tienen un rezago superior al 50 por ciento de sus presupuestos asignados para 2020, siendo las dependencias con mayores recursos no ejercidos: Medio Ambiente, Desarrollo Social, Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, y en ese tenor le siguen Seguridad Pública, Oficina del Gobernador y Salud, si, la Secretaría de Salud que no debería reportar subejercicio, lo tiene, y eso aquí y en China es criminal, porque como consecuencia de ello no se compran medicamentos vitales para salvar vidas. Así de simple…OPINA [email protected]